By La presentación de la Operación Lanza del Sur, realizada por el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, el 13 de noviembre de 2025, representa un cambio significativo en la estrategia militar de Estados Unidos en el Caribe.
Objetivos y tecnología de la Operación Lanza del Sur
Esta operación, enmarcada bajo el objetivo declarado de proteger el hemisferio y combatir el narcoterrorismo, se fundamenta en el uso de tecnologías avanzadas como drones VTOL y embarcaciones robóticas, dirigidas desde Mayport y el JIATF-S. Según el comunicado de la Marina de EE. UU., la misión implica la integración de sistemas robóticos y autónomos para la detección y monitoreo del tráfico ilícito.
Respuesta a la orden presidencial y liderazgo de la misión
La Operación Lanza del Sur busca responder a la orden del presidente Donald Trump de intensificar acciones en defensa del territorio estadounidense y combatir el narcotráfico en el hemisferio occidental. La Fuerza de Tarea Conjunta Lanza del Sur y el Comando Sur lideran esta misión, que empleará tecnologías avanzadas para controlar el tráfico ilícito mediante la implementación de sistemas no tripulados en colaboración con la Guardia Costera y centros operativos.
Innovación tecnológica y colaboración con Palantir
El comunicado también indica que la operación permitirá extraer lecciones sobre el uso de combinaciones de fuerzas tripuladas y no tripuladas, lo cual refuerza la vigilancia del dominio marítimo y las operaciones antinarcóticas. Esta estrategia incorpora una dimensión tecnológica en el despliegue de fuerzas militares, donde compañías como Palantir desempeñan un papel significativo.
Palantir, bajo la dirección de su CEO, Alex Karp, ha manifestado su compromiso con la disrupción tecnológica y la mejora de capacidades operativas. La empresa ha estrechado lazos con el ejército estadounidense, reflejados en el nombramiento de ejecutivos como Shyam Sankar en posiciones militares, y ha influido en la definición de estrategias mientras proporciona herramientas de análisis de datos y objetivos.
Reacciones internacionales y desafíos regionales
La región del Caribe, reconocida por sus soberanías frágiles y capacidades tecnológicas desiguales, enfrenta retos ante la incorporación de tecnologías de vigilancia y control. La operación también ha generado reacciones de diferentes actores internacionales. Autoridades venezolanas y cubanas han expresado su rechazo a las acciones estadounidenses, mientras que Rusia ha manifestado su preocupación por la posible desestabilización en la zona.
Finalmente, la República Dominicana, situada estratégicamente en el Caribe, podría ver afectados sus altos niveles de tráfico marítimo debido a esta nueva estructura de vigilancia. La introducción de sistemas automatizados para el control marítimo en la región plantea desafíos para la seguridad regional y las relaciones internacionales en el área.
