El espacio digital Liderazgo Noticioso inauguró su nueva temporada con una amplia entrevista al politólogo y experto en geopolítica Janel Ferreras, quien abordó en profundidad el actual conflicto entre Israel y Palestina, así como los retos de la polarización política mundial y las particularidades del sistema político dominicano.
Conflicto Israel-Palestina y Asamblea de la ONU
Interrogado sobre la reciente crispación internacional, Ferreras señaló que la Asamblea General de la ONU mantiene el cambio climático como prioridad, pero subrayó que el foco este año se dirige al enfrentamiento entre los bloques del G7 y los BRICS. Consideró que el punto de mayor tensión es el creciente número de países poderosos dispuestos a reconocer al Estado Palestino, lo que ha provocado la reacción de Israel y una postura de firmeza bajo el gobierno de Benjamín Netanyahu. Ferreras dudó de la proporcionalidad en la respuesta israelí tras ataques de Hamas, y cuestionó la falta de efectividad de los servicios de inteligencia en esos episodios iniciales. Aseguró que la tragedia humanitaria en Gaza “debería detener al mundo para reflexionar”, haciendo énfasis en el sufrimiento de la población civil.
Papel de la religión y la narrativa geopolítica
Ferreras analizó la raíz religiosa del conflicto en Medio Oriente y su impacto tormentoso en la historia. Destacó que las tres religiones abrahámicas—judaísmo, cristianismo e islam—confluyen y chocan en la región, haciendo el conflicto especialmente complejo y resistente a soluciones simples. “Las guerras más profundas han sido por creencias religiosas”, afirmó, subrayando el peso de la narrativa en Occidente y la dificultad de comprender el problema desde la distancia.
BRICS vs. G7 y el orden económico global
El invitado explicó detalladamente la creación y posible expansión de los BRICS—bloque que busca desafiar la hegemonía del dólar—, y reconoció que, a pesar de las conversaciones sobre una nueva moneda, no existe un reemplazo efectivo para la divisa estadounidense debido a la confianza y cultura internacional de su uso. También resaltó la dialéctica entre los países del G7 y las divergencias internas respecto a políticas monetarias y estratégicas, en particular tras la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, cuya política proteccionista alteró alineamientos tradicionales.
Polarización política y desafíos dominicanos
Respecto a la polarización entre izquierda y derecha a nivel mundial, Ferreras diferenció los conflictos genuinos de los narrativos, opinando que muchos asesinatos atribuidos a la radicalización política en Estados Unidos y Colombia responden más a trastornos individuales que a comandos ideológicos. No obstante, admitió un preocupante retroceso en el debate político, en el que pesan factores económicos antes que formativos. “El retroceso es consecuencia de la degradación del conocimiento y del ascenso por dinero, no por mérito”, puntualizó Ferreras.
Sobre el panorama local, afirmó que la República Dominicana tiene un modelo político “especial, pensado para beneficiar a las clases más altas” y carente de un verdadero enfoque redistributivo. Pese a los múltiples programas sociales, consideró que la proliferación de ayudas es un síntoma del fracaso estructural, no de éxito social. Admitió además la presión generada por la migración haitiana y la escasa cultura de pago impositivo.
Vengador social y esperanza de cambio
Al final de la entrevista, el experto opinó que, más allá de definiciones tradicionales de izquierda y derecha, lo que podría surgir en el futuro dominicano es un “vengador social“, una figura nueva con conocimiento profundo de la historia nacional y capacidad de buscar justicia más allá de los liderazgos existentes. Ferreras concluyó expresando esperanza en un cambio social que devuelva el mérito y la justicia como valores centrales, y defendió la necesidad de un debate informado y espíritu crítico ante la manipulación de la opinión pública.
La entrevista, desarrollada en un tono analítico y pedagógico, propone una visión amplia y contextualizada del escenario internacional y sus repercusiones en la realidad dominicana, ratificando la vigencia del análisis geopolítico y el valor de la formación cívica frente a la crisis de representatividad.