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Repatriado el cuerpo del cabo primero británico George Hooley, muerto en Ucrania

Repatriado el cuerpo del cabo primero británico George Hooley, muerto en Ucrania

El cuerpo del cabo primero británico George Hooley fue repatriado a la RAF Brize Norton, tras su fallecimiento en Ucrania, donde servía como paracaidista. Su familia recibió un mensaje conmovedor escrito por él, en el que solicitaba ser recordado con orgullo.

George Hooley, de 28 años, murió la semana pasada mientras observaba a las fuerzas armadas ucranianas probar una nueva capacidad defensiva, lejos de las líneas del frente. El Ministerio de Defensa británico calificó el suceso como un “trágico accidente”, según informó la BBC. En una carta que fue compartida a pedido de su familia, el cabo Hooley expresó sus sentimientos y deseos para sus seres queridos en caso de que no regresara a casa.

Un extracto de la misiva señalaba: “Si estás leyendo esto, significa que no llegué a casa. Por favor, no dejes que eso te destruya”. El soldado subrayó que estaba cumpliendo una misión en la que creía profundamente, señalando su compromiso con su país y los valores de democracia y libertad.

A raíz de este desafortunado evento, el Ministerio de Defensa británico emitió un mensaje en redes sociales recordando el ejemplo de valor y dedicación del cabo Hooley, extendiendo sus pensamientos a la familia, amigos y colegas del fallecido.

El pasado miércoles, tras la repatriación de su cuerpo, se llevó a cabo una ceremonia privada en la base de Brize Norton. Posteriormente, el cuerpo fue trasladado en un cortejo que incluyó a sus familiares en el camino hacia el Jardín Conmemorativo de Repatriación de Carterton. El Ministerio de Defensa indicó que el cabo Hooley iba a ser ascendido a cabo en enero, y ya había asumido responsabilidades en su despliegue en Ucrania.

Antes de su misión en Ucrania, el cabo Hooley había sido destinado en diversas ocasiones a Afganistán, África y Europa del Este. Su comportamiento fue destacado por su comandante, quien mencionó su “don poco común” de bondad y su capacidad para infundir entusiasmo en quienes lo rodeaban.

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