By A partir del miércoles 10 de diciembre, se implementará una flexibilización en los horarios de venta de bebidas alcohólicas en República Dominicana, la cual se prolongará hasta el lunes 5 de enero. La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, fue la encargada de anunciar esta medida.
Los establecimientos como discotecas, bares, clubes, restaurantes, centros de eventos, piano bares y casinos podrán operar hasta las 3:00 a. m. de domingo a jueves, mientras que los viernes y sábados el horario se extenderá hasta las 4:00 a. m. Adicionalmente, en las madrugadas del 25 de diciembre y del 1 de enero, no habrá restricciones para la venta de alcohol.
Es importante señalar que esta medida no incluye a colmados ni colmadones, los cuales deberán cerrar diariamente a las 12:00 a. m.
La disposición busca permitir que los establecimientos mencionados cuenten con un tiempo adicional para atender a los clientes durante el período navideño. De este modo, se busca facilitar las actividades sociales en días laborables y extenderlas durante el fin de semana.
La ministra Raful indicó que estas fechas son especialmente relevantes para la economía, ya que los niveles de consumo suelen incrementarse y las actividades se multiplican en el sector entretenimiento. En consecuencia, los días festivos de Navidad, en particular, se consideran excepciones para la venta de alcohol, permitiendo a las familias y amigos celebrar hasta altas horas de la madrugada.
Sin embargo, la normativa no se aplica a todos los comercios. Colmados y colmadones quedan excluidos de este régimen especial y seguirán con el horario habitual de cierre. Esta política busca abordar de forma efectiva las quejas relacionadas con ruidos y desórdenes en horas de la madrugada, especialmente en áreas residenciales de alta densidad.
El gobierno establece así un equilibrio entre la promoción de actividades festivas y la necesidad de garantizar el orden público, asignando más tiempo para el disfrute, pero también enfatizando la responsabilidad tanto de los propietarios de establecimientos como de los consumidores. La ejecución de estas medidas quedará a cargo de las autoridades competentes, y se espera una cooperación efectiva por parte de ciudadanos y empresarios.
