By El canciller de la República Dominicana, Roberto Álvarez, afirmó ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) que el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras es la única entidad autorizada para administrar el proceso electoral, resolver disputas y declarar resultados oficiales. La declaración fue realizada en el marco de una sesión extraordinaria solicitada por el país caribeño.
En la sesión, que se llevó a cabo este lunes, se discutieron las elecciones en Honduras realizadas el 30 de noviembre. El canciller Álvarez participó de manera virtual y enfatizó la necesidad de prudencia institucional, así como la protección de los materiales electorales durante el proceso. Instó a las fuerzas de seguridad a continuar apoyando al CNE en el cumplimiento de su mandato constitucional.
Durante el encuentro, el embajador Eladio Loizaga, jefe de la Misión de Observación Electoral de la OEA en Honduras, presentó un informe sobre la situación de las elecciones. El canciller dominicano destacó que la democracia y el estado de derecho deben fundamentarse en procesos adecuados y evidencias, y no en acusaciones mediáticas. Señaló que cualquier denuncia o descontento debe ser manejado a través de los canales institucionales establecidos en la legislación hondureña.
Álvarez consideró inaceptable cualquier tipo de presión política, institucional o mediática que busque interferir en las funciones del CNE. Afirmó que el proceso electoral debe llevarse a cabo de forma independiente y ajustándose a los plazos legales previstos.
El canciller concluyó que la estabilidad democrática de Honduras requiere que todas las instituciones estatales respeten las reglas del juego democrático acordadas previamente por todos los actores involucrados. También hizo un llamado al Consejo Permanente de la OEA para que se mantenga alerta y dispuesto a actuar, dentro de su marco de competencias, ante cualquier irregularidad que comprometa la integridad del proceso electoral.
Roberto Álvarez reiteró que la voluntad soberana del pueblo hondureño, expresada en las votaciones, es innegociable y no puede ser objeto de reinterpretaciones o presiones externas. En la sesión también estuvo presente la embajadora dominicana ante la OEA, Mayerlyn Cordero, quien representó al país junto a otros miembros de la región que solicitaron la reunión.
